Ultima actualizacion 15 junio, 2015
Un injerto es un método de propagación de plantas, el cual es considerado como una práctica de reproducción asexual que permite el desarrollo de distintas variedades vegetales a través de la vinculación de sus tejidos, lo que permite obtener y generar mejores hortalizas, con más calidad y en mayor cantidad.
Esta técnica data aproximadamente desde hace unos 1,000 años antes de Cristo y uno de sus objetivos fue propiciar que las plantas tuvieran mayor resistencia a plagas y enfermedades, además de crear nuevos productos vegetales e incluso obtener producciones más precoces.
Para llevar a cabo este método es importante cumplir con algunos requisitos: debe existir una compatibilidad entre las especies principalmente en género, tener semejanza entre sus propiedades botánicas, además las plantas deben estar en periodo de crecimiento y contar con un diámetro en el tallo de aproximadamente 5 milímetros.
Hacer injertos en casa es muy sencillo, sólo hay que tomar en cuenta las características de las plantas ya que deben ser compatibles, las más comunes son tomate y papa o berenjena y papa, las cuales cuentan con propiedades similares lo que permitirá obtener un cultivo óptimo y de alta calidad.
Esta técnica es muy económica ya no que requiere de gran inversión y se puede realizar con materiales que se encuentran en el hogar como cúter, masking tape o cinta canela, alcohol y hortalizas. Antes de empezar hay que ubicar un espacio para trabajar, éste debe contar con una superficie limpia y plana; cabe mencionar que el lugar de trabajo al igual que los utensilios deben ser desinfectados con alcohol para evitar que las plantas se contaminen.
Posteriormente se procede a elegir las plantas que se utilizarán para hacer el injerto, éstas deben tener una altura de 10 a 15 centímetros y contar con tres pares de hojas verdaderas, de las cuales se retirarán las dos primeras para facilitar el trabajo.
Una de las plantas servirá como base o patrón y la otra como variedad; a la variedad hay que realizarle un corte recto con el cúter en forma de bisel a cinco centímetros del tallo para que se pueda introducir en la base, a continuación se hará un corte similar en el patrón retirando la parte que tiene hojas, se tomará la base y se le hará un corte a la mitad, la profundidad debe corresponder con el corte de la variedad.
Luego de realizar los cortes se introducirá la variedad dentro del patrón procurando que queden estrechamente unidos evitando que queden burbujas de aire entre ellas; por último se colocará un poco de cinta alrededor de la unión con el fin de fijarla bien, el masking funcionará como un soporte y mantendrá unidas a las plantas.
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Categories: Conoce hidroponía
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